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martes, 17 de septiembre de 2013

Cómo hacer Yogurt Casero y Ecológico.

Aprendiendo a hacer Yogurt casero y ecológico

Hacer yogur en casa es muy sencillo; supone un ahorro de energía, de recursos materiales y de dinero, y además podemos comérnoslo fresco.

Para hacer yogur sólo hay que dar leche calentita "para comer" a un poco de yogur que ya tengamos. A una temperatura de unos 45ºC, las bacterias que hay en el yogur producen una fermentación que transforma los azúcares de la leche en ácido láctico. De esta forma la leche se va espesando y convirtiéndose en yogur.

El yogur se usa desde la antigüedad. Se cree que se formó espontáneamente por la acción del calor del sol sobre los recipientes en los que se guardaba la leche, que estaban hechos con pieles o estómagos de animales en los que se encuentran las bacterias que forman el yogur.


¿Qué hace falta?


- Leche (tanta como yogur queramos hacer).

- Algo de yogur 100% natural sin azúcar (comprado o del que nos queda en casa).

- Botes de vidrio que tengamos en casa: tantos como sean necesarios para que quepa toda la leche. Tienen que estar limpios y secos.

- Una cuchara limpia.

- Algún aislante que conserve el calor: papeles de diario, una caja de corcho o porexpan, un termo, una manta.

- Lo idóneo (aunque no es imprescindible) es tener un termómetro que llegue hasta 90ºC. Se venden en tiendas de material de laboratorio.


¿Cómo se hace?


1.- Poner una cucharada de yogur en cada bote. Por cada medio litro de leche hace falta una cucharada, más o menos.

2.- Se pone la leche a fuego lento hasta que llegue a 85ºC, removiendo de vez en cuando con un utensilio limpio (por ejemplo el propio termómetro) para que no se pegue en el fondo. Esto tarda unos 10 minutos, dependiendo de la temperatura ambiente.


3.- Si no tienes termómetro, apaga el fuego cuando la leche empiece a humear y a subir ligeramente.

4.- Remover la leche de vez en cuando hasta que baje a 45ºC. Tarda una media hora, según la estación. Si baja de 45ºC, volveremos a encender el fuego hasta que llegue a esa temperatura.

Si no tienes termómetro, mete medio dedo meñique (es el más sensible) en la leche: estará a punto cuando todavía te quemes pero puedas aguantar el dedo dentro. Si no te quemas, vuelve a calentarla hasta 45ºC.

5.- Vertemos la leche en los botes, cuanto más los llenemos mejor (así quedará menos aire).


6.- Remover vigorosamente con la cuchara para que el yogur se mezcle bien con la leche.

Tapar los botes y guardarlos de manera que se conserve el calor: envueltos con papel de diario y metidos en una caja, envueltos con una manta, etc. (en este caso puede ser conveniente ponerlos en una bolsa para evitar que la manta se manche).

Dejarlos reposar sin moverlos para nada durante al menos 6 horas (por ejemplo toda la noche) en el lugar más caliente de la casa.

Sacamos los botes de la caja, esperamos 5 o 10 minutos para que pierdan la tibieza y los metemos en la nevera. En unas 4 horas el yogur se habrá espesado y estará listo para comer. Se continúa espesando durante dos días.


¿Cómo se conserva?


Sin abrir el bote, el yogur se conserva 8 o 10 días.

Una vez abierto, al cabo de unos 5 o 6 días se formarán hongos de color blanco y rosa en la superficie del yogur (en contacto con el aire). Si lo vamos comiendo regularmente no se llegarán a formar nunca.

Si el bote nos dura más de 5 días es conveniente que quitemos los restos de yogur de las paredes.

Después de coger yogur se tapará el bote, y procuraremos devolverlo a la nevera cuanto antes.


Más trucos.


- Es muy cómodo usar un reloj-alarma que nos avise cuando ha pasado más o menos el rato de calentar y enfriar la leche.

- Muchas cocinas y hornos los llevan incorporados, y también se pueden comprar.

- Podemos forrar una caja de cartón con láminas de corcho o porexpan que tengamos por casa. En un laboratorio nos pueden dar una caja de porexpan usada. esto es para meter los botes a reposar.

- Si comes bastante yogur, mejor ponerlo en botes grandes: así ocuparán menos en la nevera.

- Si comes poco, es mejor usar botes pequeños porque se acabarán antes y será menos probable que se formen hongos.

- Si se nos va a acabar el yogur podemos volver a hacerlo con lo que queda. Se puede pasar toda la vida sin tener que comprarlo nunca.

- El yogur se puede comer con trozos de fruta, frutos secos, miel.

- Es también un ingrediente para ensaladas, pasteles, sopas.

- Con el yogur se pueden hacer bebidas y platos de verano: ayran (yogur con agua y sal), tzatziki (yogur colado con pepinos y ajos).


¿Cuesta mucho?


- El proceso de preparar yogur es muy sencillo. No hace falta ninguna destreza ni "vocación" especial.

- El tiempo real que le tenemos que dedicar es de unos 10 minutos. Todo el proceso puede durar unos tres cuartos de hora, pero mientras tanto podemos hacer otras cosas (por ejemplo cocinar o fregar los platos). Después, el yogur se hace solo.

- Cuesta lo mismo para cualquier cantidad de yogur que queramos hacer.

- Si lo hacemos a partir del yogur que nos queda sólo tenemos que comprar la leche, que cuesta el mismo esfuerzo que comprar yogur ya hecho.

- Un litro de leche vale menos de la mitad que un litro de yogur comprado. (Trata de utilizar leche orgánica).



¿Qué ganamos?


1.- Sabemos que en el yogur hecho en casa no hay conservantes ni aditivos y los nutrientes no se han desnaturalizado con procesos industriales.

2.- Lo comemos al poco de hacerlo. El que compramos puede haberse elaborado mucho antes, y con el tiempo las bacterias se van muriendo.

3.- Será especialmente sano y bueno si partimos de leche y yogur ecológicos.

4.- Hacer cosas nosotros mismos nos puede generar satisfacción.

5.- Es educativo. Podemos compartir la actividad con los niños.

6.- Podemos usar los mismos botes toda la vida. Por cada litro de yogur que hacemos dejamos de gastar 8 envases de plástico, 8 tapas de aluminio y un envoltorio de cartón (también lo hay en botes de vidrio pero no es fácil de encontrar).

En cambio usamos un envase de leche: la mejor opción es el vidrio (también muy difícil de encontrar) y después el plástico. El tetrabrik es lo más desaconsejable.

7.- Ahorramos mucha energía, contaminación e infraestructuras: plantas de producción, tintas para imprimir los envases, transporte y almacenaje en frío. Según un estudio alemán, las materias primas de un yogur de fresa pueden haber recorrido 8.000 kilómetros.

Fuente: www.foro.univision.com

MAS INFO:
http://buenasiembra.com.ar/salud/terapias-alternativas/el-kefir-un-alimento-para-la-vida-1247.html

domingo, 8 de enero de 2012

Las Causas del Autismo (videos)

Niño pequeño
Las investigaciones sobre los origenes y las causas de los trastornos generalizados del desarrollo como el autismo, son relativamente recientes.

Aunque en los últimos años se han empleado muchos esfuerzos en investigaciones al respecto, y se ha avanzado enormente en el conocimiento de estos trastornos, todavía sigue siendo, hoy en día, un verdero misterio la causa del autismo.

Debido a la enorme variedad que existe entre los diferentes niños afectados de este trastorno, todas las investigaciones apuntan a que no se puede hablar de una única causa del autismo, sino que sería un trastorno multicausal donde el entorno también va a ser determinante en la evolución del trastorno.

Entre las teorías que cuentan con una mayor aceptación en la comunidad científica están las que sitúan la enfermedad en uno o varios genes responsables del desarrollo de la enfermedad, la malformación o disfunción en determinadas áreas cerebrales y la detección tardía del trastorno.

Causas genéticas


Diferentes estudios científicos han encontrado evidencias suficientes para afirmar que el autismo está escrito en los genes cuando el niño nace. Estos estudios han visto que en el caso de gemelos idénticos - con la misma información genética - cuando uno de ellos padece el trastorno, el otro tiene una probabiidad cercana al 70% de padecerlo.

Según esta línea de investigación, aunque el autismo no se detecta hasta pasado, al menos, el primer año de la vida del niño, éste ya nace con cierta determinación genética para desarrollarlo. Además, el hecho de que solo uno de cada cuatro afectados de este trastorno son niñas, hacen suponer que los genes que determinan el sexo juegan un papel decisivo en el desarrollo de esta enfermedad.

Otros estudios que siguen esta línea parecen indicar que, además de esta determinación genética, son necesarios otros factores para que finalmente, el niño desarrolle el trastorno.


Malformaciones cerebrales en el origen del Trastorno


Se han realizado diferentes investigaciones con técnicas neurológicas avanzadas que tratan de comparar el cerebro del niño con autismo con el cerebro de un niño no afectado.

Estos estudios han encontrado diferencias significativas en áreas encargadas de las funciones ejecutivas., es decir, del área encargada de autorregular nuestra conducta y dirigirla hacia fines o metas autodeterminadas. También se han encontrado diferencias en otras áreas relacionadas con las emociones y el lenguaje, aunque los resultados no son, por ahora, concluyentes.

Alteraciones en las conexiones cerebrales


Se ha postulado como otra posible causa del autismo, una alteración en la actividad nerviosa cerebral. Las neuronas - células encargadas de transmitir toda la información cerebral - utilizan unas sustancias llamadas neurotransmisores para concectarse unas con otras. En algunos estudios clínicos, se han detectado mayores niveles de un tipo de nerotransmisores en niños afectados de trastorno autista que en niños no afectados. Esto sugiere la existencia de una disfunción del funcionamiento cerebral como causa de las alteraciones autistas.

Los factores ambientales como causas del autismo


Otros estudios sitúan diferentes factores ambientales en el origen del autismo. Estos estudios tratan de negar la existencia de factores genéticos y orgánicos en las alteraciones autistas, sino que plantean los factores biológicos como una predisposición a padecer el trastorno, que, en presencia de otros factores ambientales, desarrollan el trastorno o lo agravan. Algunos de los factores ambientales que se han propuesto en relación con el trastorno son:

Algunas investigaciones han subrayado la existencia de una elevada cantidad de sustancias tóxicas en el organismo de los niños afectados por el trastorno.

Estas investigaciones han tratado de relacionar una posible intoxicación por metales pesados con el desarrollo del trastorno, sin embargo, los resultados son hasta el momento, inconclusos. Dentro de esta línea de investigación se ha especulado acerca de la influencia de las vacunas, algunas de las cuales continen mercurio, con el desarrollo del autismo.

Esta causa se ha planteado a la luz de que numerosos padres situaban una vacuna como el inicio de los síntomas del trastorno y ha conllevado a que numerosos padres pongan en tela de juicio las ventajas de las vacunas para la salud de sus hijos. Sin embargo, no existen evidencias científicas que relacionen las vacunas con una intoxicación por mercurio, y ésta, con el inicio del trastorno.

Por otra parte, supone un riesgo muy elevado para la salud de nuestros hijos privarles de las vacunas de las que hoy contamos para la prevención de numerosas enfermedades moartales, mientras que no se demuestren evidencias claras que den cabida a esta hipótesis.

- Intolerancias alimenticias

En relación con las intoxicaciones, se ha planteado como una causa más el que los niños con alteraciones autistas sufren de numerosas intolerancias alimentarias. Se plantea de esta manera que, siguiendo una dieta individualizada a las características del niño se pueden paliar los efectos del trastorno, aunque las evidencias a este respecto, son, todavía, poco concluyentes.


- La detección tardía del trastorno


La detección tardía del trastorno es la causa fundamental de que el trastorno se agrave con el desarrollo del niño afectado.

Cada día se pone más hincapié en la importancia de la detección precoz de este tipo de trastornos que permitan poner los medios educativos, psicológicos y médicos más adecuados para paliar los efectos que el trastorno tiene en el desarrollo del niño. Fuente




jueves, 26 de mayo de 2011

Los Niños Qbesos...porqué?


LA OBESIDAD EN LOS NIÑOS Y ADOLECENTES



16 a un 33 por ciento de los niños y adolescentes son obesos. La obesidad es una de las condiciones médicas más fáciles de reconocer, pero cuyo tratamiento es muy difícil. Los niños con sobrepeso tienden a convertirse en adultos con sobrepeso, a menos que adopten y mantengan unos patrones más saludables de comer y hacer ejercicio.

¿Qué es la obesidad?

Unos kilos extra no implican obesidad. Sin embargo, ello puede indicar una tendencia a ganar de peso con facilidad y la necesidad de cambios en la dieta y/o ejercicio. Generalmente un niño no se considera obeso hasta que pesa por lo menos un 10 por ciento más que el peso recomendado para su estatura y tipo de cuerpo.

La obesidad comúnmente comienza en la infancia entre las edades de 5 a 6 años y durante la adolescencia. Los estudios han demostrado que el niño que es obeso entre las edades de 10 a 13 años tiene un 80 por ciento de probabilidad de convertirse en un adulto obeso.

¿Qué causa la obesidad?

Las causas de la obesidad son complicadas e incluyen factores genéticos, biológicos, del comportamiento y culturales. Básicamente la obesidad ocurre cuando una persona come más calorías que las que el cuerpo quema. Si un padre es obeso, hay un 50 por ciento de probabilidad de que los niños sean también obesos.

Sin embargo, cuando ambos padres son obesos, los niños tienen un 80 por ciento de probabilidad de ser obesos. Aunque algunos desórdenes médicos pueden causar la obesidad, menos del uno por ciento de todos los casos de obesidad son causados por problemas físicos.


La obesidad en los niños y adolescentes puede estar relacionada con: Hábitos de comer, comer de más o perder la capacidad para parar de comer, falta de ejercicio ej: los niños que se pasan acostados en el sofá, historial de obesidad en la familia, enfermedades médicas, problemas endocrinológicos o neurológicos, medicamentos como: esteroides y algunos medicamentos siquiátricos, cambios en la vida que les causan mucho stress: separaciones, divorcio, mudanzas, muertes, abuso, problemas familiares o de los pares, baja autoestima, depresión y otros problemas.

¿Cuáles son los riesgos y complicaciones de la obesidad?

Hay muchos riesgos y complicaciones debidos a la obesidad. Las consecuencias físicas incluyen: U
n aumento en el riesgo de enfermedades del corazón, la alta presión de la sangre, diabetes, al respirar, dificultades al dormir.
La obesidad en los niños y adolescentes está también asociada con un aumento en el riesgo de problemas emocionales. Los adolescentes con problemas de peso tienden a tener una autoestima mucho más baja y tienden a ser menos populares con sus pares. La depresión, la ansiedad y el desorden obsesivo compulsivo también pueden ocurrir.

¿Cómo se puede manejar y tratar la obesidad?

Los niños obesos necesitan una evaluación médica por un pediatra o médico de familia para considerar la posibilidad de una causa física. En ausencia de un desorden físico, la única manera de perder peso es reduciendo el número de calorías que se comen y aumentando el nivel de actividad física del niño o adolescente.

La pérdida de peso duradera sólo puede ocurrir cuando hay motivación propia.
Ya que la obesidad a menudo afecta a más de un miembro de la familia, el establecer hábitos sanos de comer y hacer ejercicio regularmente como actividad familiar pueden mejorar las oportunidades de lograr exitosamente el control de peso para el niño o adolescente.

Las formas de manejar la obesidad en niños y adolescentes incluyen: Un programa de control del peso-los hábitos de comer (comer despacio, desarrollar una rutina) planificar las comidas y hacer una mejor selección de los alimentos (comer menos alimentos grasosos y evitar los alimentos de poco valor, o sea comida chatarra) controlar las porciones y consumir menos, aumentar la actividad física (especialmente el caminar) y tener un patrón de vida más activo, de lo que su niño come en la escuela, las comidas en familia en vez de estar viendo la televisión o estar en la computadora, limitar las meriendas, llevarlo a un grupo de apoyo.

La obesidad con frecuencia se convierte en una cuestión para toda la vida. La razón por la cual la mayoría de los adolescentes ganan las libras que han perdido es que al alcanzar su meta, ellos regresan a sus hábitos viejos de comer y ejercitarse.

Un adolescente obeso por lo tanto tiene que aprender a comer y a disfrutar de los alimentos saludables en cantidad moderada y ejercitarse regularmente para mantener el peso deseado.

Los padres de un niño obeso pueden mejorar la autoestima de su hijo enfatizando sus puntos fuertes y cualidades positivas en vez de enfocarse en el problema del peso.

Cuando un niño o adolescente con obesidad también tiene problemas emocionales, el siquiatra de niños y adolescentes puede trabajar con el médico de la familia del niño para desarrollar un plan de tratamiento comprensivo.

Tal plan ha de incluir una metas de pérdida de peso, manejo de la actividad física y dieta, modificación del comportamiento y la participación de toda la familia.

Fuente: American Academy of Child and Adolescent Psychiatry

domingo, 13 de febrero de 2011

Alerta ! Vacuna de gripe A, y Narcolepsia

Ginebra, 8 feb (EFE).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció hoy que al menos 12 países registraron casos de narcolepsia en niños y adolescentes que previamente habían sido vacunados contra la gripe A.


El Comité Consultivo Mundial de la Seguridad de Vacunas de la OMS publicó un comunicado en el que especifica que "desde agosto de 2010, y tras masivas vacunaciones contra el virus de la gripe H1N1 en 2009, se detectaron casos de narcolepsia en niños y adolescentes en al menos 12 países".

No obstante, el grupo señaló que hace falta "más investigación", para determinar la relación exacta entre los casos de narcolepsia y la vacunación contra la gripe, sea con la vacuna Pandemrix o con otra.

La semana pasada, la OMS anunció que investigaba un aumento de casos de narcolepsia en Finlandia que podría tener relación con la vacuna "Pandemrix" del fabricante Glaxo, dado que todos los afectados parecían haber sido inmunizados con el mismo producto.

El Gobierno de Finlandia había informado de casos de narcolepsia entre vacunados contra la gripe A de entre 4 y 19 años.

En Helsinki, el Instituto Nacional de Salud y Bienestar de Finlandia (THL) publicó un estudio según el cual la vacuna contra la gripe AH1N1 Pandemrix, fabricada por la compañía farmacéutica GlaxoSmithKline, multiplica el riesgo de contraer narcolepsia infantil.

Según ese estudio, entre 2009 y 2010 se diagnosticaron 60 casos de narcolepsia en niños y adolescentes finlandeses de entre 4 y 19 años, de los cuales 52 (casi el 90 por ciento) habían sido vacunados con Pandemrix.

El fenómeno llevó a las autoridades sanitarias finlandesas a interrumpir el uso de esta vacuna de forma preventiva hasta determinar sus posibles efectos secundarios.

La narcolepsia es un estado patológico que produce en el afectado accesos irresistibles de sueño en cualquier momento.

La OMS ha donado 36 millones de dosis de la vacuna "Pandemrix" a 18 países en desarrollo, tres de ellos latinoamericanos, pero hasta el momento no se han tenido noticias de que se hayan dado casos de narcolepsia.

La lista de países que recibieron "Pandemrix" es la siguiente: Armenia, Azerbaiyán, Bangladesh, Bolivia, Burkina Faso, Cuba, Corea del Norte, El Salvador, Etiopía, Ghana, Namibia, Filipinas, Tayikistán, Togo, Ruanda, Kenia, Mongolia y Senegal.

El informe completo y definitivo sobre la relación entre la narcolepsia y esta vacuna se difundirá el 31 de agosto próximo.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Propóleos, parásitos y niños.

propoleosparasitosyniaosSi bien son muy poco frecuentes las parasitosis que pasan del animal doméstico al humano, se traía el ejemplo solo a los fines de mostrar que las cosas no siempre son como parecen.

Las parasitosis son tan frecuentes en el campo como en la ciudad, aunque se crea comúnmente que no es así. Incluso, la frecuencia de animales domésticos por cuadra, en las ciudades es abrumadora, hecho que puede confirmar cualquier veterinario. También es notorio que las deposiciones de los animales, son más evidentes en la ciudad que en el campo, donde no solo son tapadas por la tierra, sino que se degradan rápidamente, cosa que no ocurre en el pavimento.

Sería imposible decir cuáles son los parásitos más frecuentes en la estadística. No porque esto no esté tabulado, sino porque al no buscarse específicamente, no se los halla y no entran al balance total.
Los antiparasitarios comunes sólo pasan por dentro del tubo digestivo eliminando los parásitos que allí se encuentran, pero al no salir del tubo, no afectan a los de otras localizaciones, que si bien son poco frecuentes, generalmente revisten mayor gravedad o importancia.

El uso del propóleos, dado en miligramos por kilo de peso, tanto en niños como en adultos, e incluso a los animales domésticos, resuelve este problema. El propóleos se distribuye en todo el organismo por sangre y linfa y tiene un amplio espectro como antiparasitario, a más de reforzar las defensas, desintoxicar y limpiar el cuerpo.

Existen quienes inculpan todas las enfermedades actuales a los parásitos. Sin llegar a ese extremo,  hay  que  considerar que un  organismo con parásitos, -dependiendo de su número- es un organismo que funciona mal, intoxicado y que da una serie de síntomas y molestias, que de no ser conocidas e identificadas se confunden con otras enfermedades. Contrariamente a lo que dice la academia, hoy las parasitosis también son globalizadas. Ya no hay parásitos tropicales o australes. Sólo hay que buscarlos. 

Desde que pude acreditar que en un pueblo de La Pampa, la mayoría de los niños están infectados de Hymenolephis nana, creo en cualquier parásito en cualquier lugar. Un párrafo especial para la Giardia lamblia. Parásito de duodeno y vesícula. Por ser de localización alta no aparece en los análisis habituales y por acantonarse en vesícula escapa a los antiparasitarios de línea.

La Giardiasis es altísima en Argentina, cuando se la busca. A más de los síntomas habituales de parásitos (que puede no darlos) se caracteriza por las pieles malsanas o fácilmente afectadas y por dar síntomas respiratorios, broncoespasmos o síndromes asmáticos. Muchos de los niños etiquetados como asmáticos y medicados audazmente, solo tienen guardias. Es cuestión de hacer diagnóstico -o hacer medicina- y dejar los moldes que no sirven.

jueves, 20 de mayo de 2010

Los niños no son adultos pequeños

Los niños no son adultos pequeños 1

Los seres humanos vivimos desde el nacimiento en contacto permanente con los contaminantes. Los niños son más vulnerables que los adultos a las exposiciones ambientales ya que todos los sistemas de su organismo, están en desarrollo. La investigación epidemiológica trata de estudiar el efecto a nivel plobacional de esas exposiciones, por pequeñas que sean. La Salud Pública, apoyada en los hallazgos epidemiológicos, debe implementar medidas de prevención, especialmente dedicadas a proteger la salud de los niños.

El niño y su entorno

Los seres humanos vivimos desde el nacimiento en contacto permanente con los contaminantes ambientales transmitidos por aire, agua, dieta y suelo. La exposición a un contaminante en una etapa de la vida puede tener efectos negativos en etapas posteriores, ya sea en la misma persona o en sus descendientes.
En un mundo globalizado, las exposiciones ambientales no son una excepción. Casi todos los recién nacidos en cualquier lugar del mundo presentan niveles detectables de compuestos orgánicos persistentes. El fenómeno de la distribución planetaria de estos compuestos puede ser uno de los ejemplos que justifica de la manera más clara la máxima: "piensa globalmente, actúa localmente", ya que el uso local de estos químicos tiene efectos globales que pueden llegar a ser más intensos en zonas alejadas que en sus puntos de uso.

Los niños son más vulnerables al entorno que los adultos
, debido a que sus sistemas neurológico, inmunológico y digestivo, junto con otros sistemas, están todavía en formación. Además, sus patrones de conducta, como gatear o colocarse objetos en la boca, pueden implicar una mayor exposición a algunos contaminantes. Por ello su desarrollo físico, social e intelectual, desde su concepción hasta la adolescencia, requiere un ambiente protegido.

Los factores de origen de muchas enfermedades crónicas se acumulan en el organismo desde las primeras etapas de la vida, y todo lo que ocurre en las etapas embrionaria y fetal es de vital importancia. Existe por tanto un número creciente de enfermedades en la infancia asociadas con un entorno contaminado. La contaminación ambiental contribuye a afectar el desarrollo neuroconductual, inmunitario y sexual de los niños. La nutrición materna durante el embarazo, la lactancia y la nutrición infantil juegan un doble papel en el desarrollo del niño, por un lado son una de las fuentes de exposición a contaminantes, y, por otro, son también una fuente de nutrientes beneficiosos para la salud.

La investigación epidemiológica (la disciplina que estudia el origen y la distribución de las enfermedades en las poblaciones humanas, con el propósito de prevenirlas) se ha basado clásicamente en el estudio de las causas de diferentes procesos patológicos definidos como enfermedades o síndromes. En los últimos años ha habido un creciente interés en estudiar pequeñas alteraciones que, aunque puedan considerarse dentro de lo normal para un individuo, pueden ser importantes a nivel poblacional, si una gran parte de las personas se encuentran expuestas. Éste sería el caso para la mayor parte de contaminantes que encontramos en los países desarrollados. Sus niveles en la población general son lo suficientemente bajos como para no causar trastornos agudos, pero son los suficientemente elevados como para producir pequeñas alteraciones que, sumadas con otros factores de riesgo más conocidos, a la larga pueden ayudar a desarrollar alguna patología.

Cualquiera que sea el grado de afectación de estos compuestos sobre la salud, el hecho de estudiarlos en épocas muy tempranas de la vida abre las puertas a un campo muy importante para la salud pública: la posibilidad de aplicar medidas de prevención para reducir o erradicar el problema.

Fuente: http://www.proyectoinma.org/que-afecta-a-salut/ninos-y-entorno/index.html