Todos acumulamos pilas de papel que ya no usamos en casa: revistas,
diarios, papeles impresos que usados e incluso cuadernos viejos. Todo
ese conglomerado puede tener un uso mucho mejor que montañas que
entorpecen el paso.
Reciclar papel en casa es fácil, rápido y sustentable.
¿Por qué no probás?
¿Por qué reciclar papel?
Actualmente, el ritmo de consumo de papel continúa creciendo, haciendo que las especies de árboles útiles para la fabricación de madera disminuyan de forma notable.
La fibra que se recupera para reciclar puede producir nuevos productos de papel, totalmente reciclados o sólo parcialmente, pero con un límite de resistencia a los procesos de reciclados. Es decir que las propiedades importantes del papel se van degradando con sus tratamientos, así que no son indefinidas.
Cuanto mayor sea el porcentaje de reciclados en los procesos de fabricación del papel, reduciremos la deforestación. Con una tonelada de papel reciclado, pueden salvarse 17 árboles de ser procesados.
No sólo salvamos el aire puro que se genera, sino que también evitamos contribuir al efecto invernadero y a destruir la cuna de distintas especies. Además de menos recursos, la energía que se emplea al reciclar papel es mucho menor que al producir papel nuevo y genera menos contaminación en la tierra y el agua.
En estos motivos radica la importancia de apostar al reciclaje y tratamiento del papel.
Para reciclarlo en casa, vas a necesitar papel, agua y un bastidor.
¿Cómo armar el bastidor?
Además de ahorrarnos un poco de dinero, podremos realizarlo de las medidas exactas que necesitamos.
Te contamos primero como armar un bastidor con cosas que seguramente tenés en tu casa:
4 listones de madera (de la longitud que deseemos)
Clavos
Martillo
Fragmento de tela mosquitera
Lija
Tijera
– Primero, lijá los listones de madera para que no te lastimes las manos al trabajar
– Clavá, los listones formando un marco rectangular, poniendo el más largo sobre el más corto, cuidando que las uniones queden bien al ras.
– Sumar la tela mosquitera. Cortándola derecha, (podés usar de guía las líneas del marco), la ubicamos y colocamos el primer clavo en una esquina. Repetí de la misma manera en las 4 esquinas restantes y luego en el centro de cada listón.
Cuidá que la tela quede muy bien estirada, para lograr un buen resultado final. Cuanto más tirante esté la tela mosquitera, mejor se podrá trabajar.
Una vez listo, ¿cómo reciclar el papel?
– Primero, tomá el papel a reciclar y cortalo en pedazos chicos. Ponelos en un bowl con agua caliente, poniendo el doble de agua que de papel. Dejalos unos minutos para que se ablanden.
– Llevá todo a la batidora, hasta que quede una mezcla espesa. Cuando tengas la mezcla, dejala reposar unas horas.
– Cuando hayan pasado las horas, eliminá el exceso de agua con un colador.
– Una vez que la hayan sacado, poné la pasta escurrida debajo de agua fría para aclararla. Cuando la saques, escurrila una vez más.
- Con una cuchara, volcá la pasta sobre el bastidor y extendela, estirándola. Lo que la estires ahora va a definir el tamaño del papel reciclado.
¡Listo! Cuando se seque vas a tener el papel reciclado preparado para usar.
Si querés colorearlo, incluso podés agregarle un poco de tintura cuando todavía es una mezcla.
Reciclar papel en esta cantidad es muy sencillo. Hay agrupaciones y plantas que se encargan exclusivamente de su tratamiento a gran escala, y necesitan contar con mucho material para poder tratarlo al menor costo energético posible.
Si tenés papeles y cartones para reciclar, podés encontrar puntos cercanos para llevarlos en www.dondereciclo.org/mapa/carton-y-papel
Usar productos reciclados es una excelente forma de ayudar al mundo.
En Mercado Limbo podés encontrar, entre otras cosas, agendas y anotadores hechos con papel reciclado:
Usando menos hojas, hacemos más hojas en los árboles. ¡Probá reciclando tus papeles!
MAS INFO: http://buenasiembra.com.ar/ecologia/articulos/durabilidad-para-reducir-residuos-248.html
Reciclar papel en casa es fácil, rápido y sustentable.
¿Por qué no probás?
¿Por qué reciclar papel?
Actualmente, el ritmo de consumo de papel continúa creciendo, haciendo que las especies de árboles útiles para la fabricación de madera disminuyan de forma notable.
La fibra que se recupera para reciclar puede producir nuevos productos de papel, totalmente reciclados o sólo parcialmente, pero con un límite de resistencia a los procesos de reciclados. Es decir que las propiedades importantes del papel se van degradando con sus tratamientos, así que no son indefinidas.
Cuanto mayor sea el porcentaje de reciclados en los procesos de fabricación del papel, reduciremos la deforestación. Con una tonelada de papel reciclado, pueden salvarse 17 árboles de ser procesados.
No sólo salvamos el aire puro que se genera, sino que también evitamos contribuir al efecto invernadero y a destruir la cuna de distintas especies. Además de menos recursos, la energía que se emplea al reciclar papel es mucho menor que al producir papel nuevo y genera menos contaminación en la tierra y el agua.
En estos motivos radica la importancia de apostar al reciclaje y tratamiento del papel.
Para reciclarlo en casa, vas a necesitar papel, agua y un bastidor.
¿Cómo armar el bastidor?
Te contamos primero como armar un bastidor con cosas que seguramente tenés en tu casa:
4 listones de madera (de la longitud que deseemos)
Clavos
Martillo
Fragmento de tela mosquitera
Lija
Tijera
– Primero, lijá los listones de madera para que no te lastimes las manos al trabajar
– Clavá, los listones formando un marco rectangular, poniendo el más largo sobre el más corto, cuidando que las uniones queden bien al ras.
– Sumar la tela mosquitera. Cortándola derecha, (podés usar de guía las líneas del marco), la ubicamos y colocamos el primer clavo en una esquina. Repetí de la misma manera en las 4 esquinas restantes y luego en el centro de cada listón.
Cuidá que la tela quede muy bien estirada, para lograr un buen resultado final. Cuanto más tirante esté la tela mosquitera, mejor se podrá trabajar.
Una vez listo, ¿cómo reciclar el papel?
– Primero, tomá el papel a reciclar y cortalo en pedazos chicos. Ponelos en un bowl con agua caliente, poniendo el doble de agua que de papel. Dejalos unos minutos para que se ablanden.
– Llevá todo a la batidora, hasta que quede una mezcla espesa. Cuando tengas la mezcla, dejala reposar unas horas.
– Cuando hayan pasado las horas, eliminá el exceso de agua con un colador.
– Una vez que la hayan sacado, poné la pasta escurrida debajo de agua fría para aclararla. Cuando la saques, escurrila una vez más.
- Con una cuchara, volcá la pasta sobre el bastidor y extendela, estirándola. Lo que la estires ahora va a definir el tamaño del papel reciclado.
¡Listo! Cuando se seque vas a tener el papel reciclado preparado para usar.
Si querés colorearlo, incluso podés agregarle un poco de tintura cuando todavía es una mezcla.
Reciclar papel en esta cantidad es muy sencillo. Hay agrupaciones y plantas que se encargan exclusivamente de su tratamiento a gran escala, y necesitan contar con mucho material para poder tratarlo al menor costo energético posible.
Si tenés papeles y cartones para reciclar, podés encontrar puntos cercanos para llevarlos en www.dondereciclo.org/mapa/carton-y-papel
Usar productos reciclados es una excelente forma de ayudar al mundo.
En Mercado Limbo podés encontrar, entre otras cosas, agendas y anotadores hechos con papel reciclado:
Usando menos hojas, hacemos más hojas en los árboles. ¡Probá reciclando tus papeles!
MAS INFO: http://buenasiembra.com.ar/ecologia/articulos/durabilidad-para-reducir-residuos-248.html