Cronicas Humanas de la Era Verde
Concón Julio 997 D.G.
Han pasado casi mil años del final de la Era del Tecnomercado en el planeta Tierra, el calendario marca 997 D. G. o después de Gonzales. Todo el planeta humano se prepara para la enorme celebración del milenio.
Cuando Jesús Gonzales investigador del laboratorio de genética de la Universidad de Valparaiso, descubrió la forma de alterar el gen 276 de la segunda espiral del cromosoma Y, no se imaginó el increible resultado de su investigación.
Sobretodo porque, no hayando mejor forma de demostrar su descubrimiento, reemplazó este gen, el de la pigmentación de la piel humana, por un gen vegetal que, asociado a la producción de clorofila, producía un indeleble color verde superficial en todo el cuerpo.
La importancia del descubrimiento de Gonzalez fue trascendental para desarrollar una variedad de humano transgénico capaz de sintetizar glucosa por fotosíntesis.
La gran ventaja de este humano transgénico, es que puede sobrevivir solo con energia solar y agua, más algunos minerales que puede absorver del agua misma o comiendo un poco de tierra rica en orgánicos.
El nacimiento de los primeros humanos transgénicos sucedió para el solsticio de verano en el sur, del año 2007 de la Era cristiana o el 007 D. G. Fué la revolución total. La iglesia, una poderosa entidad mística de aquella Era excomulgó a Gonzalez, lo que le importó poco porque el era taoista y la derecha política de aquel entonces se tiró en picada contra el descubrimiento, puesto que socavaba uno de los pilares de su poder, cual era el control absoluto sobre la producción alimentaria.
El nuevo humano verde no nesesitaba consumir más comida.
Durante veinte años nacieron cerca de cuarenta millones de nuevos seres humanos con clorofila, por deseo expreso de sus padres, en su mayoria pobres, pues con eso liberaban para siempre a sus hijos de la pesada carga de tener que trabajar para otros y comer, más encima de comer mal.
A los veinte años nació la segunda generación de humanos verdes, la primera natural y se confirmó el postulado que la mutación clorofílica era absolutamente dominante.
Pronto las masas de humanos verdes en muchos continentes se comenzaron a distanciar de las situaciones políticas y económicas contingentes de sus países, dado que ya casi no mantenían ningún arraigo a la vieja cultura de los humanos de colores.
Es cierto que la cantidad de tonalidades de verde era tan variada como las tonalidades de base de los humanos originarios; había verde oscuro, verde nilo, verde amarillo, etc.
Los rasgos faciales se mantuvieron inalterados y las especies tuvieron que afrontar sólo tres cambios que también fueron fundamentales:
La total caida de todo pelo.
La nesesidad absoluta de andar desnudos.
Una nesesidad vital de acceso a la luz solar.
El año 103 D.G. murió el último humano de color, un amarillo asiatico, de Sida, una enfermedad propia de los humanos no verdes, y desde entonces toda la humanidad fué verde en todas sus graduaciones.
Gran parte de la antigua tecnología de la Era anterior quedó en el camino, más que nada por falta de interés y mucha de ella por falta de uso.
Los humanos dejaron lentamente su apego a los bienes materiales y se preocuparon de acceder al agua, el sol y la tierra nutricia. La nesesidad de uso del suelo para la agricultura pasó a ser nesesidad de uso del suelo para simplemente estar.
Aumentó notablemente la cantidad de espacio disponible y hubo grandes migraciones a las zonas intertropicales y los valles de altura en las búsquedas del sol.
La humanidad realizó un enorme y exitoso esfuerzo para recuperar naturalmente las extensas zonas usadas por la antigua agricultura, limpiando remanentes de agroquímicos peligrosisimos y mejorando la variedad biológica de los territorios en aras de la optimización de los ciclos naturales.
Los grandes centros de estudio y desarrollo mantuvieron por un par de siglos su trabajo de investigación, apuntando más que nada a resolver los problemas ambientales antiguos y aquellos derivados del conpleto giro que dió la humanidad en tan poco tiempo.
Uno de los grandes descubrimientos del segundo siglo D.G. fue la adaptación orgánica de la especie humana al consumo de agua salada; con ello, miles de millones de humanos verdes se volcaron a los océanos del planeta para establecer colonias flotantes ambulatorias que obtenían su sustento del sol, el agua y las sales disueltas.
Estos humanos tomaron un curioso tono cochayuyo.
De entre los miles de cambios acaecidos en la humanidad debido al fenómeno verde, tal vez el más importante fue el de la enorme disponibilidad de tiempo social y personal que las sucesivas generaciones dispusieron.
La primera oleada de humanos verdes desarrolló una elevada tendencia a la mística, que inició lo que entonces se llamó la religión Fitotao, cuya reverencia al sol y a la naturaleza despertó el sentido de pertenencia del humano al todo planetario; pero más que nada elevó los grados de comunicación empatía grupal interactivo; las PGI. Hacia el año 300 el PGI hacía del total humano una gran red de pensamiento interconectado.
100 mil millones de cerebros podían conectarse como uno solo, con un potencial para el desarrollo de ideas y el uso kinéticoque permitió la estructuración de las agrupaciones humanas volantes, es decir las comunidades antigravitacionales, como las que existen en la actualidad, dedicadas exclusivamente a la fotosíntesis, el sexo lúdico y procreativo y el pensamiento abstracto personal o comunitario.
La carencia casi total de estrés, aumentó la longevidad de los humanos casi en un modo vegetal, 360 años pasó a ser la media normal de vida, superando toda posibilidad de plagas y patologías virales.
Las grandes reservas de espacio de los sectores subtropicales del planeta, empezaron a ser usadas por humanos de fotosíntesis más eficiente y gran tolerancia a las bajas temperaturas.
Hacia el año solar 760 D.G. la cantidad de almas humanas tocó el límite Wong-li, es decir; existían todos los humanos que podían existir en ésta dimensión y las existencias de almas disponibles en la dimensión de origen se había agotado.
La comunidad Wong-li fue el ente pensador abstracto que predijo la saturación de las almas, cincuenta años que el fenómeno sucediese.
Esto planteó un límite al crecimiento de la especie humana en el número de 573 mil millones.
Nacen nuevos humanos sólo en el evento que los humanos vivos de esta dimensión, pasen al siguiente espacio dimensional, liberando un alma que se reencarna inmediatamente.
Esta es la razón por la cual la gestación es un evento tan celebrado en las comunidades actuales, Tan solo existiendo un alma disponible el espermatozoide es capaz de penetrar en el óvulo.
Como la liberación del alma ocurre en un espacio infinitesimal del tiempo actualizado, las parejas procreantes se refuerzan por coincidir con él para poder fecundar. Por ello es que se da una actividad sexual tan entusiasta y permanente en todas las comunidades.
Ahora se acerca el cumplimiento del milenio D. G., la Tierra es, varios cientos de metros más abajo de las comunidades humanas, un paraíso biológico sustentable.
Al ocupar el nivel medio de 600 metros sobre el nivel del mar, la superficie usada por la especie humana subió con el cubo de dicha cantidad, por lo que existe un alto grado de dispersión de las comunidades, que se aventuran libremente por sobre y por abajo de la capa de nubes.
Siempre en el límite de Wong-li, la sensación, con todos los humanos vivos es de completud total, hay sol para todos. (jjj)
Pedro Serrano Rodríguez Especial para "Buena Siembra".